Un plato suculento que tiene mucha demanda, tanta que en verano deben elaborarlo a diario. Uno de estos platos tradicionales es el Cocido Lebaniego pero también destacan por sus ibéricos y quesos, a parte, de sus carnes y pescados frescos. Su plato estrella es el Cocido Lebaniego pero tienen una gran carta donde podemos encontrar Ternera Guisada con Setas (la carne es de ganadería propia “picos de europa” y con certificados de calidad). Si hablamos de platos de cuchara se nos viene a la mente legumbres, pero encontramos guisos que no llevan este alimento y se les considera también platos de cuchara, todo es dependiente de la región de España donde nos hallemos. Incluso cada zona tiene varios tipos propios. Tienes a elegir entre 4 primeros, 4 segundos y tres postres.
Se le añade chorizo, morcilla, tocino, hueso de jamón, carne de ternera (cecina, hueso de rodilla y zancarrón) y el relleno, que es una masa llevada a cabo de miga de pan, huevo, chorizo y perejil. Los 9 mejores restaurantes para comer de puchero en Cantabria. Es de exactamente los mismos dueños que El Serbal, el único lugar de comidas con una estrella michelín de Santander. De hecho están justo al lado el uno del otro, sólo que el Querida Mar es la opción “low cost”.
En el momento en que mencionamos que son los 9 mejores no es por al azar, sino más bien pues el año pasado en el 2017 estos restaurantes participaron en la V Ruta de los Pucheros de Cantabria. Una idea de la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria y la Dirección General de Turismo del Gobierno de Cantabria para saber el más destacable plato de cuchara tradicional de Cantabria. En este caso, nos detendremos en el cocido montañés, un guiso elaborado con alubia, compango de la tierra y berza. Eran tiempos en los que la única comida del día debía ser lo más suculenta viable. La Caseta de Bombas es un asador de carnes y pescados situado en uno de los sitios mucho más simbólicos de Santander.
El local está realmente bien, pero para mi gusto quizás es algo caro. Eso sí, las vistas desde este lugar de comidas son espectaculares. A 15 minutos en coche se encuentra el cautivador pueblo de Carmona, ubicado en la misma comarca del Nansa y que constituye el mejor ejemplo en Cantabria del pueblo montañés. Enormes casonas blasonadas con los escudos de las familias hidalgas que poblaron el valle, ordenadas sobre una colina verde rodeada de montañas, y de qué forma no, de vacas.
Regresa La Cuchara
Lo de barato es ya otro cantar, pero relajado que asimismo te cuento el valor aproximado por persona a fin de que no te lleves sorpresas. De sendero, pasaremos al lado de pueblos tan pintorescos como Terán o Valle, con mención particular para el premiado Bárcena Mayor, escogida Séptima Joya Rural de España en el año 2019. Entre sus casonas balconadas adornadas con geranios rojiblancos se encuentra el asimismo el premiado lugar de comidas La Solana, cuyo cocido recibió, también en 2019, el premio que la prensa regional otorga al mejor cocido montañés. Los cocidos, guisos y potajes son tan viejos como el hambre, y la historia no ha dudado en legarnos la fama que estos platos tienen desde la Antigüedad.
Nos encontramos muy contentos con la acogida que tuvimos pues vino muchas personas a probar nuestro cocido. Ha gustado bastante a los clientes del servicio y evidentemente, asimismo al jurado. Está hecho, principalmente, y lo más importante, con excelentes materias primas. Y sin prisas, como lo hacían las abuelas, poco a poco, con cariño y bien reposado». Una vieja casa de comidas situada en el concejo de Valdáliga.
Guía De Sitios De Comidas
Si queréis comer buenos platos de cuchara, como el cocido montañés, el cocido lebaniego o el guisote con los restaurantes que les hemos puesto no fallaréis en comer este plato de cuchara tradicional. Este mesón de cuidada mesa y espléndida bodega cultiva una cocina de extenso fantasma donde resaltan las carnes selectas y los pescados y mariscos frescos. Entre sus guisos, sopa de marisco, cocido montañés y plato de cuchara diario. Emplazado en un edificio centenario y con terraza en la Alameda de Oviedo. Si decides ir a este restaurante vas a deber hacerlo sin prisas para disfrutar de una auténtica cocina de abuela en un espacio único. Los embutidos, guisos y platos de cuchara son sus especialidades.
Recibe todos los meses información y novedades relacionadas con el ámbito de la automoción y el planeta de la competición, sugerencias para viajar en carretera, consejos para conducir y nuestras últimas novedades en neumáticos. El almacenaje o ingreso técnico que se usa de forma exclusiva con objetivos estadísticos anónimos. No sugieren “novedosa cocina”, pero sí tienen un “toque muy propio”. Restaurante ubicado en el centro urbano de Liencres, Cantabria.
Lugar De Comidas La Montaña
Apetitosos potajes y platos de cuchara entre los que sobresalen los cocidos lebaniego, repetidamente premiado, y montañes. Su pasión por la cuchara hacen que tengan una extensa variedad de guisos en olla ferroviaria, podemos destacar la de Caldereta de Oveja Churra. Además en su carta puedes conseguir una extensa variedad de arroces y platos vegetarianos.
Maite Rodríguez: «el Plato Es Una Bomba, Merecía Ganar»
No admite reservas así que no vayas muy tarde o te vas a quedar con las ganas. La Radio es de los mejores sitios de comidas de Santander y además está bastante cerca del centro. Pero para ir a La Prensa tendrás que ir en taxi, bus o en coche. Pero tranquilo porque en La Prensa se puede estacionar bien, si bien en las inmediaciones de La Radio es más difícil.
Cuenta con un menú cerrado por 24.50 euros por persona tanto de día como de noche. Además de esto, las vistas que se tienen desde este lugar de comidas a toda la playa del Sardinero son una verdadera pasada. La Bodega del Riojano es otro de los restaurantes de Santander con mucho más solera. El bar está decorado tal y como si el tiempo se hubiera detenido en él. El local es amplísimo y cuenta también con barra para picar algo. Te recomiendo en especial la tortilla con salsa de callos.
El Barco
Tras 2 horas de cocción, las verduras estarán muy blandas, y la berza y las alubias prácticamente en su punto. Este es buen instante para desgrasar algo el cocido, sacando toda o una parte de la grasa roja que quedará en la superficie. Después, con ayuda de unas pinzas, quita las verduras y colócalas en un vaso de batidora. Esta labor se puede hacer más simple si, al comienzo de la cocción, utilizamos una malla de verduras, pero no es en ningún caso necesario, ya que al haberlas introducido en trozos grandes se encuentran enseguida.